Traicionando a quien más se lo merece
martes, 18 de septiembre de 2007
Días que no volverán
Leo a Reverte. Aunque supongo que no hay nada mejor para desmontar un mito que conocerlo, sigue gustándome alguien que parece mantenerse en sus trece y firmar lo que suscribe. En su columna de esta semana le mete dos o tres mojadas a Henry Kamen, el presunto hispanista. Cuesta creer que en estos tiempos de política correcta y cogérsela con papel de fumar sea uno de los pocos que todavía aguante en esa tesitura, en esa trinchera. Sólo por eso, tenga o no razón, me gusta. Supongo que el mundo no sería tan agradable si todos fuéramos Revertes con el colmillo fuera, pero en el que vivimos actualmente, descafeinado y de mujeres bollicao, faltan bastantes tíos como Reverte y mujeres de bandera.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario